Salmo 69(68): 15-16, 30-31, 33-34
15 ¡No dejes que me hunda en el
lodo!
¡Ponme a salvo de los que me odian
y de las aguas profundas!
16 ¡No dejes que me arrastre la
corriente!
¡No dejes que el profundo remolino
me trague y se cierre tras de mí!
30 Pero a mí, que estoy enfermo y
afligido,
levántame, Dios mí, y sálvame.
31 El nombre de Dios celebraré en un cántico,
le ensalzaré con la acción de gracias;
33 Vean esto, los humildes, y regocíjense,
¡Reanímense, los que buscan al Señor.!
34 Pues el Señor escucha a los pobres,
y no desprecia a los suyos que están presos
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